martes, 4 de noviembre de 2008

TEMPERANCIA vs RESILIENCIA

Temperancia vs Resiliencia
(Dios y la Psicologia)
2da. parte
¿Conoces la distancia que existe entre el Sol y la Tierra? Son poco menos de 142.700.000 Km. Para que lo entiendas, CIENTO CUARENTA Y DOS MILLONES SETENCIENTOS MIL KILOMETROS. Escuche decirle a un científico que esa es la distancia exacta que necesita un planeta para estar de una estrella y tener probabilidades de que exista vida, si estamos tan cerca como Venus no habría vida, si estamos tan lejos como Marte no habría vida, pero no solo la distancia fue lo que inicio la vida, decía el científico, también la densidad del planeta o volumen, un Billón de Kilómetros Cúbicos (1.000.000.000.000 Km3), su radio casi Cuarenta Mil Kilómetros (40.000 Km), su diámetro Doce Mil Setecientos Cincuenta y Seis Kilómetros (12.756 Km). Todo esto fue lo que le dio a esta roca la oportunidad de ser idónea para la vida. Científicamente hablando, ¿que probabilidades existe de que esto se repita en el universo? El número es astronómico. Religiosamente hablando, ¿no te parece que una mano divina formo esta roca?... me viene a la memoria unas palabras de el escritor de ciencia ficción mexicano Gabriel Trujillo Muñoz “Hoy, a tantos miles de años de distancia, en una época en que todo parece tener una explicación racional o científica, la fantasía sigue en pie de lucha y, aunque asediada por explicaciones psicológicas o por desdenes ideológicos, goza aun de perfecta salud.”
Quiero pensar que en la vida ocurre lo mismo, cuando hoy la ciencia medica tiene respuesta para todo, los milagros siguen dando de que hablar en esta comunidad, los milagros gozan aun de perfecta salud, y nadie sabe como algunas fibras en el cuerpo son mas resistentes en una persona, que en otra que sucumbe ante cualquier enfermedad.
RESILIENCIA: Hay muchas cosas a tener en cuenta al buscar un Psicólogo que trabaje en tus zonas Positivas, en tu zona de los milagros. Precio, experiencia y las referencias son algunas de las cosas que probablemente debes tener en cuenta, siempre lo hacemos verdad, primero el precio, luego las ideas. Antes de buscar, asegúrese de tener al menos una pequeña idea de la labor y de las platicas que quiere tener, que quiere se hagan. De ninguna manera, jamas encontraras a un experto en ti, alguien que sepa como eres, como piensas o como actúas en determinados casos y momentos. Si tiene un Psicólogo Certificado que te conoce y cree saber quien eres, pues mejor búscate otro que no te conozca, búscate uno que no conozca los detalles de tu actual estado anímico y de respuesta. Ahora si ya tienes un Psicólogo certificado que no te conoce, ponte en contacto con el y háblale de Resiliencia, pídele que te hable de Resiliencia. Luego por el bien de los seres humanos hagan una lista de las cosas buenas, y que conste que digo por el bien, no para humanizar a los seres humanos porque en palabras del abogado José Gómez “cada intento del hombre por humanizar sus actividades termina siendo una desgracia para el mismo y para el planeta” hacer una lista con las especificaciones de lo que nos fortalece, describiendo exactamente todo lo que nos ayuda a completar los proyectos personales, una lista con esas cosas que solo los fortalecidos y no los fuertes, tiene en común. Anota en esta lista todas las respuestas que tienes para cada una de las posibles situaciones de la vida, discrepa de las respuestas y de las soluciones que consigues en la vida, en los libros, en tu mente. Asegura de que cuando escribas en la lista las palabras definitivas, las pueda entender cualquier niño que lo necesite. Sabes que no hay manera de tener éxito sin poner lo que adentro tenemos, se toma en cuenta la información que nos da el alma y el corazón, las posibilidades de éxito se dan cuando solo a uno esto puede servir de ayuda.
A fines de la década del setenta, se iniciaron conversaciones en un nuevo dominio, relacionadas con el desarrollo interior de las ciencias sociales del concepto de Resiliencia. La discusión entorno a este concepto se inició en el campo de la psicopatología, se constató con gran asombro e interés, que algunos de los niños sanos criados en familias en las cuáles uno o ambos padres eran alcohólicos y que lo habían sido durante el proceso de desarrollo de sus hijos, no presentaban carencias en el plano biológico, ni psicosocial, sino por el contrario, alcanzaban una “adecuada” calidad de vida, entonces surgió la pregunta, que influye en las psicopatías de algunos niños no sanos, de donde surgía su afección cuando se pensó que era de la adicción de sus padres al alcohol.
Resiliencia tiene su origen en el idioma latín, en el término RESILIO que significa volver atrás, volver de un salto, resaltar, rebotar, él término fue adaptado a las Ciencias Sociales por caracterizar aquellas personas que, a pesar de nacer y vivir en situaciones de alto riesgo, se desarrollan psicológicamente sanos. Habilidad para surgir de la adversidad, adaptarse, recuperarse y acceder a una vida significativa y productiva. Capacidad humana universal para hacer frente a las adversidades de la vida, superarlas o incluso ser transformado por ellas. La resiliencia es parte del proceso evolutivo y debe ser promovido desde la niñez.
La resiliencia se ha caracterizado como un conjunto de procesos sociales e intrapsíquicos que posibilitan tener una vida sana, viviendo en un medio insano. La resiliencia habla de una combinación de factores que permitan a un niño, a un ser humano, afrontar y superar los problemas y adversidades de la vida. La resiliencia es la capacidad de resistir, demostrar fuerza y no deformarse a pesar de las adversidades. Los niños resilientes como aquellos que se enfrentan bien a pesar de los estresores ambientales a los que se ven sometidos en los años más formativos de su vida.
Distingue dos componentes: 1).- La resistencia frente a la destrucción; es decir, la capacidad de proteger la propia integridad bajo presión. 2).- Es la capacidad de forjar un comportamiento vital positivo, pese a circunstancias difíciles.
Componentes de la Resiliencia:
Introspección: arte de preguntarse a sí mismo y darse una respuesta honesta
Independencia: saber fijar límites entre uno mismo y el medio con problemas; capacidad de mantener distancia emocional y física sin caer en el aislamiento
Capacidad de Relacionarse: habilidad para establecer lazos e intimidad con otras personas para equilibrar la propia necesidad de afecto con la actitud de brindarse a otros.
Iniciativa: gusto de exigirse y ponerse a prueba en tareas progresivamente más exigentes.
Humor: encontrar lo cómico en la propia tragedia
Creatividad: capacidad de crear orden, belleza y finalidad a partir del caos y el desorden
Moralidad: consecuencia para extender el deseo personal de bienestar a toda la humanidad y capacidad de comprometerse con valores.
Autoestima consistente: base de los demás pilares y fruto del cuidado afectivo consecuente del niño o adolescente por parte de un adulto significativo.

TEMPERANCIA: Para que la fantasía, la creación artística o el don pueda sanar la herida de un niño, la sociedad adulta tiene que estar preparada para acogerlo y para acompañarlo tal como es, con sus particularidades de niño y de traumatizado. Aquí debe estar de manera fehaciente lo moral de la sociedad, la naturalidad de las religiones, la unión de los adultos, la Temperancia en DIOS. Cuando se recupera el lazo social, y a veces el contacto con una sola persona es suficiente, cuando, en esta nueva trama, el niño herido logra convertirse en alguien que da, sólo entonces el patito feo podrá transformarse en cisne. La felicidad y el bienestar del niño no son un efecto de la casualidad o la suerte, es una producción humana nunca individual, ni siquiera familiar, sino el resultado del esfuerzo de la sociedad en su conjunto. La protección y la defensa de los derechos de los niños constituyen la tarea de todos los que se reconocen como seres humanos. El maltrato es humillante e impone un sentimiento de inutilidad, desamparo, desesperanza, incompetencia social y culpa en los niños que para escapar de él, deben realizar un extraordinario esfuerzo, para controlar el resto de sus vidas o emplear la fuerza para victimizar a otros. Sin embargo, la capacidad de muchas personas que han sufrido situaciones indeseables para llevar unas vidas normales es un testimonio claro de la elasticidad del espíritu humano, de su capacidad de Temperancia. Los que han tenido que superar una gran prueba describen, el encuentro con una persona significativa, DIOS, la comprensión de su amor, el optimismo por la vida eterna, el humor, el afecto, la aceptación de sí mismo, la ilusión, la alegría, la generosidad, la esperanza, la creatividad, el gusto por la vida y el trabajo; describen un encuentro con los factores de DIOS y su Temperancia. Somos los adultos quienes debemos disponer alrededor del niño las guías de desarrollo que les permitirán tejer su vida, pero son ellos mismos los que se cobijaran en la frazada de su espiritualidad y de su creencia en un DIOS que los ama.
José Antonio O.L.

1 comentario:

Azul... dijo...

Todo en equilibrio.... aunque yo siempre preferiré la intuición a las explicaciones racionales :)

Un besote, José Antonio